jueves, 31 de julio de 2014

Aceros - Obtención

El acero se obtiene sometiendo el arrabio a un proceso de dcscarburación y eliminación de impurezas llamado afino. Este afino, u oxidación del exceso del elemento carbono, se puede realizar según varios procedimientos. 
Afino al crisol Este método de fusión se emplea para producir aceros de calidad superior partiendo de fundición; o acero, si se trata de retinarlo. Se efectúa en hornos de crisol, aunque éstos tienen los inconvenientes de un gran consumo de combustible, de dar una pequeña cantidad de fundición en un proceso relativamente largo, de una mano de obra numerosa y de un desgaste rápido de los crisoles. Los más sencillos son los llamados de viento libre. En general, son de grafito, el cual se coloca encima de una pie/.a refractaria llamada queso que evita su contacto con la parrilla y además consigue que el metal a fundir quede en la zona en que la temperatura es mayor, por estar rodeada de llamas. 
Acero al crisol Los primitivos hornos empleados para fabricar aceros eran de crisol y funcionaban según el procedimiento empleado por Houndsmand. Ahora, los crisoles se utilizan para obtener aceros especiales ya que suelen aventajar a los hornos eléctricos de arco voltaico. El crisol es de grafito o de acero inoxidable (20 % de níquel y 25 % de cromo) y suele calentarse externamente, mediante carbón, gas o petróleo; o, más corrientemente, por inducción. Estos hornos pueden ser basculantes o fijos. Su capacidad está en función de su movilidad, de modo que los fijos la tienen de unos 100 kg, y los basculantes, de unas 5 toneladas. La ventaja tecnológica de este tipo de hornos surge de la posibilidad de crear una atmósfera controlada en su interior. 
Los hornos de crisol calentados por inducción pueden funcionar: 
 a) Con núcleo y frecuencias normales. 
b) Sin núcleo y con altas frecuencias. 
Los hornos de inducción con núcleo no se utilizan para fabricar acero, ya que la fusión de éste sólo se logra a base de elevadas temperaturas en el horno, exigencia técnica que repercute deteriorando el material refractario que protege al núcleo. Los hornos de inducción sin núcleo están formados por un crisol refractario que contiene el metal rodeado por un arrollamiento de tubo de cobre alimentado con corriente alterna. Se pueden considerar como transformadores cuyo primario es el arrollamiento que rodea al horno. El secundario de este transformador está constituido por la carga del horno. 
Las ventajas de los hornos de inducción se resumen en las siguientes: 
a) Completa ausencia de carburaciones superhciales. 
b) Rapidez para alcanzar elevadas temperaturas. 
c) Agitación permanente del baño por procedimientos electrodinámicos. 
d) Comodidad en el funcionamiento. 
Debido a estas ventajas, los hornos de crisol calentados por inducción se emplean para fabricar aceros inoxidables, aceros rápidos, aceros inoxidables refractarios, aceros magnéticos, etcétera.

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