Para comprender la forma de trazar un diagrama de equilibrio y su posterior utilidad, nos
referiremos a un ejemplo sencillo: la aleación de
dos metales, A y B, completamente solubles en
estado líquido y en estado sólido (fig. 6).
Primero se trazan las curvas de enfriamiento
que corresponden al metal puro A (I) y ál metal
puro B (VI) y las cuatro intei-medias (II, III, IV, V)
que corresponden a cuatro aleaciones de A y B
con diversos contenidos de uno y otro metal.
Trasladando, por medio de líneas de trazos, las
temperaturas de transformación al sistema situado en la derecha (temperatura-porcentaje),
resultan los puntos A y B, que corresponden a las
temperaturas de transformación de los metales
puros, y las parejas de puntos m, y m2, n, y n2, p,
y p2, q¡ y q2, que corresponden a las dos temperaturas de transformación para cada una de las
aleaciones formadas.
Uniendo los puntos A, m¡, n¡, p,f q, y B, se obtiene
la línea que indica el comienzo de la solidificación, llamada línea da líquido, ya que, por encima
de ella, la aleación es líquida en todos los porcentajes de sus componentes. Uniendo los puntos A, m2, n2, p2, q2 y B, se obtiene la línea que indica el final de la solidificación, o línea de sólido,
por debajo de la cual la aleación es sólida en todos los porcentajes. Entre ambas líneas, la aleación está parcialmente sólida y parcialmente
líquida.
El diagrama obtenido así se puede completar
trasladando y uniendo, por la llamada línea de
transformación, todos los puntos en que se producen cambios de constitución en el enfriamiento de la aleación sólida, resultando en conjunto el denominado diagrama de equilibrio.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario